jueves, 29 de mayo de 2014

Pablo Fidalgo

Pablo Fidalgo Lareo é natural de Vigo, aínda que actualmente reside en Lisboa. Poeta da xeración dos oitenta xa leva publicados catro poemarios ata o de agora:

La educación física(Pre-Textos, 2010)
La retirada (Premio Injuve, 2012)
El tiempo de las tragedias absurdas(Fundación Cuña-Casasbellas, 2012)
Mis padres: Romeo y Julieta. (Pre-textos, 2013)

Propoñemos algúns dos seus poemas para rematar este mes de maio:



Si conocerse es guardar el secreto durante años
nos hemos conocido.
Si sólo pudieras conocer a una persona más
¿Me elegirías a mí?
Si sólo pudieras conocer un días más
¿Sería este?
Si sólo pudieras vivir una noche más ¿Elegirías dormirte? La educación física


Sentía vergüenza de mis padres
por tener que explicar su separación
sin poder explicar antes su amor.

Mis padres viven juntos sus primeros años
sin que sus familias lleguen a enterarse.
Todos sus amigos guardan el secreto.
Yo transformo su necesidad de silencio
en un primer amor por las mentiras.

Mis padres buscaron un lugar en la playa
donde poder protegerme de la historia.
Muchos años después volví a esa playa,
cada día una mujer distinta me preguntaba
¿E ti, de quén es fillo?

Mis padres: Romeo y Julieta.
¿Después de todo quién recuerda
un conflicto entre dos familias
en esta absurda tierra
en esa absurda época?

Madre, creíamos que todos estos años sin él
eran tiempo perdido
y cuando finalmente fui a conocerlo
supe que era tiempo ganado al dolor.

Yo soy hijo de los que se bañaban desnudos
pero nunca perdieron la vergüenza.
Mi declaración de amor fue desnudarme en la calle
y volver a vestirme sin explicar nada más. Mis padres: Romeo y Julieta.


La luz se movía entre los árboles,
y yéndonos del río, vimos a un hombre y una mujer desnudos.
Vimos a su hijo acostado en una toalla
como si los tres acabaran de nacer.
Inclinados sobre el niño, adorándolo,
podrían ser tus propios padres y tú mismo.
La belleza es incontestable para nosotros
que hemos atravesado el infierno.

Mire donde mire están ellos
que ni siquiera se giran para ver quién soy
totalmente concentrados en su propia fe.
Después seguí mi camino deseando ser un padre
expulsado del paraíso una vez más,
pero sabiendo que quizá esa belleza, ese amor,
no se me habían entregado.

Y entendí, después del instante perfecto,
que todo se renueva de golpe: padres e hijos.
Pero nosotros cuando vamos a un lugar
no nos llevamos ningún recuerdo.
Hemos sido irrepetibles y fascinantes tantas veces al día
que nadie se ha fiado de nosotros.

Allí donde vayas, mires donde mires,
tus padres renuevan su presencia,
vigilan que todos sepan quién eres
aunque les cueste la vida. Mis padres: Romeo y Julieta


  Para coñecer máis sobre o poeta, infórmate na súa web.

No hay comentarios:

Publicar un comentario